Algunos críticos que no conozcan la dureza de esta montaña dirán que antes se subía sin oxígeno, sin la indumentaria adecuada, ahora las comunicaciones permiten evitar el aislamiento que sufrían los montañeros y que en definitiva ha perdido su esencia y que es una ascensión con "trampas", pero lo cierto es que los montañeros siguen teniendo accidentes mortales, amputaciones, fracturas..., y la hostilidad de esta montaña especialmente a partir de los 8000 m (zona de la muerte) todavía persiste.
Por eso para mi la tecnología 3G en el Everest me parece una buena noticia, ya que supone un empujón moral que a veces le hace falta al espíritu humano para alcanzar cimas muy complicadas.
Esta noticia la publicó el periódico "El Mundo" hace unos días y el desarrollo de esta noticia aparece en la dirección abajo reseñada.
http://www.elmundo.es/elmundo/2010/10/29/navegante/1288348443.html