La cuarta posición conquistada hoy en el Gran Premio Generali de la Comunitat Valenciana ha brindado el título del octavo de litro al piloto leridano del Red Bull Ajo Motorsport.
La temporada 2010 comenzó donde había terminado la anterior, con Márquez luchando por el podio, pero castigado por las caídas (aunque el accidente en Jerez de la Frontera, entre dos terceros puestos, fue debido más a un fallo mecánico que a un error del piloto. Sin embargo, sólo era cuestión de tiempo que rompiera su mala racha e iniciara el camino de la victoria. Su triunfo en Mugello fue el primero de cinco éxitos seguidos que le propulsaron hasta el liderato del campeonato.
En la segunda mitad de la temporada hubo momentos de nerviosismo, con el decepcionante resultado en Brno -en medio de unas condiciones difíciles- o la caída en Indianápolis, cuando lideraba la carrera. Y aunque ganó con estilo en Misano, fue víctima de un choque en la primera curva de Aragón que le hizo perder el liderato. No obstante, el leridano demostró de nuevo su fuerte determinación en las tres carreras transoceánicas disputadas a continuación y todavía más en la épica remontada que protagonizó en Estoril. Sin embargo, la gran regularidad de su rival Nico Terol le llevó hasta la última carrera de la temporada con el título todavía por decidir. Su cuarta posición de este domingo en el circuito Ricardo Tormo de la Comunitat Valenciana ha sellado finalmente la primera corona mundial para este gran talento del motociclismo.
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